“Prefiero no hacer nada a subirme al rodillo”, “Es inaguantable, un suplicio, no puedo estar más de media hora ahí subido”, “Me aburre mucho y me canso rápido”…
Estas frases se oyen habitualmente cuando se habla sobre el rodillo, sobre todo en época invernal, con malas condiciones climatológicas, o al comentar con otros ciclistas que parte de tu entrenamiento se basa subirte al “potro de tortura”.
Las opiniones respecto al rodillo son muy diferentes. Hay gente a la que le encanta subirse y echarle horas (los menos), otros que lo hacen por que no les queda más remedio (lo más) y unos cuantos que directamente no quieren verlo ni en pintura, y cogen las bicicleta haga el tiempo que haga o directamente no lo hacen.
No es mi intención hablaros en este post sobre aspectos relacionados con el entrenamiento físico, en primer lugar porque hay muchos sitios donde acceder a esta información y en segundo lugar porque ni el blog trata sobre ello ni tengo el conocimiento suficiente para hacerlo. Y para ello os remito al blog de Chema Arguedas, donde podeis encontrar tanto la explicación de los beneficios que puede aportar este entrenamiento, como un plan para realizar si no hay otra alternativa. Personalmente, estoy siguiendo este plan, y con el paso de los meses se notan sus beneficios, además de ser asequible para los que no tienen mucho tiempo libre entre semana.
Además del entrenamiento físico que supone, en lo que a esta entrada respecta, quiero destacar lo importante que es de cara al entrenamiento psicológico, ese gran olvidado. Hacer las sesiones de rodillo que tengamos planificadas, y cumplir lo establecido, va a reforzar nuestra motivación y autoconfianza, y sobre todo, nos va a dar un “plus” de dureza mental, ya que ser capaces de aguantar el sufrimiento del rodillo, nos puede servir más adelante en situaciones similares cuando hagamos una salida exigente con el club, una competición o un entrenamiento duro.
La idea de este artículo, es dar algunas pautas para no perder la motivación, cómo superar los momentos “duros” y “dolorosos” durante las sesiones y para sobrellevar lo mejor posible la duración de las mismas.
* Motivación.
Sin motivación, subirnos al rodillo va a ser muy complicado y probablemente ni hagamos el intento, y de hacerlo, seguramente no nos va a servir de mucho por múltiples razones.
En general, sin motivación ni vamos a hacer rodillo ni vamos a montar en bicicleta. Muchas veces cuesta mantener la motivación en el día a día, y si nuestra única solución es el ciclismo de salón, aún más. Por tanto, es muy importante tener claras algunas cuestiones.
Ya os he hablado de la planificación de objetivos en otra entrada. Ese objetivo, es la base de nuestra motivación, y la búsqueda de cumplirlo, será la que nos haga dar pedales en el “potro de tortura” cuando no tengamos ganas ni tiempo. Un objetivo que sea atractivo, realista pero que a la vez suponga un desafío personal, mantendrá alta nuestra motivación, hará que montemos en el rodillo porque es lo único que podemos hacer la mayoría de los días, y nos reforzará y mantendrá ese nivel de motivación a medida que veamos que somos capaces de cumplir lo establecido para conseguir el objetivo deseado.
- Planificación.
Además del/los objetivo/s general/es, esencial para tener la continuidad necesaria, es muy importante y muy útil y beneficioso, planificar cada semana y cada sesión que vayamos a realizar, dentro de la planificación más amplia.
La razón es porque sabiendo qué vamos a hacer durante esa semana o durante una sesión determinada, vamos a tener las cosas mucho más claras, y si la motivación es alta, no vamos a intentar “escaquearnos” de alguna sesión o hacer menos tiempo del establecido previamente.
Sin planificación, habrá semanas que montaremos mucho y otras nada, e igualmente durante las sesiones, puede que estemos dos horas o 15 minutos. Hay mucha gente que prefiere entrenar de este modo y le funciona magníficamente, pero con el rodillo, creo que es mucho más complicado hacerlo y mantener la regularidad que necesitaremos para cumplir nuestros objetivos.
Como podréis observar, los tres aspectos que acabo de comentar, no difieren casi nada de cualquier otro plan que hagamos. Puede resultar en muchas ocasiones una “obviedad”, pero está comprobado que estas obviedades son las que más fácilmente olvidamos y no cumplimos, y luego su repercusión puede ser enorme, ya que lo vemos tan “sencillo” que no le damos la importancia suficiente.
* Preparación de las sesiones.
Las sesiones en el rodillo se pueden hacer muy duras, tanto física como mentalmente. Muchas veces, el no tener “distractores” y que nuestra atención no tenga que estar centrada en lo que nos rodea, hace que los minutos parezcan horas, que nos duela el culo y las piernas, etc. y sobre todo, que demos mil vueltas a la cabeza y pensemos cosas como “esto es insufrible”, “no estoy más de media hora”, “no quiero estar aquí ni un minuto más”, “me duele todo”, “Esto no sirve para nada”, etc.
Por lo tanto, con el fin de evitar e intentar superar esos momentos complicados, mentalmente hablando sobretodo, voy a daros algunos consejos y posteriormente técnicas, muchos de ellos, que he ido probando y al menos a mí, me funcionan satisfactoriamente. Como todo en la vida, cada uno es un mundo, así que probad hasta que encontréis lo que mejor se adapte a vosotros y vuestras circunstancias (muchos de vosotros posiblemente si hacéis el rodillo en un trastero o en la terraza no podéis ver la televisión o poner la música alta, etc.).
- Planificar las sesiones. Ya hemos hablado antes de la importancia de planificar cada sesión. Es muy útil establecer el tiempo total de cada sesión, el tiempo de calentamiento, de enfriamiento, de tiempo en cada zona de pulsaciones, watios o sensaciones, de series, etc. Y sobre todo, algo que funciona muy bien es establecer los momentos de descanso o parada. ¿Por qué? pues porque si por ejemplo decidimos parar 10 segundos cada 15 minutos, tenemos un “mini-objetivo” e intentaremos aguantar lo que nos quede sin parar y con ello conseguiremos centrar nuestra atención, y nos servirá de refuerzo si somos capaces de conseguirlo, ya que muchas veces aguantar un poco más de tiempo sin parar o ponerse de pie, supone un extra de “dolor”, algo que nos vendrá muy bien cuando nos sucedan situaciones similares (para esos momentos también están las técnicas que después explicaré, por lo que también nos vale como entrenamiento psicológico). Como ejemplo real, en mi caso, paro por primera vez a los 30 minutos, luego a los 15 minutos, y luego cada 10 minutos, unos 30 segundos cada vez (a veces se puede alargar o acortar, sobre todo si hay series de por medio, en las que se intenta aprovechar el tiempo de recuperación para hacer ese descanso).
- Tener la mente ocupada, es una de las estrategias más útiles en el rodillo. Se suele dar el efecto paradójico por el cual, cuanto menos intentamos pensar en nuestro “dolor”, mucho más nos centramos en él, y más intensa es la sensación. Puede que para muchos el estar pendiende de las pulsaciones, la cadencia o los watios sea suficiente, pero para la mayoría estar tanto tiempo pendiente de una sola cosa, hará que tarde o temprano acabemos descentrándonos. Alguna de las cosas que podemos hacer para ocupar nuestra mente son:
- Escuchar música. Podemos hacer una lista con música más o menos movida dependiendo de la sesión que vayamos a hacer.
- Escuchar podcast. Aprovechar a escuchar algún programa que habitualmente no nos da tiempo. Puede ser muy útil para aprender idiomas o cualquier otro tema de interés para nosotros.
- Escuchar audiolibros. Ya que no tenemos mucho tiempo para leer, siempre se puede recurrir a leer esa novela que tenemos pendientes. El problema, que mucha gente no soporta el sonido metálico y artificial de los mismo.
- Ver la televisión. Siempre que sea posible es muy buena solución. El número de cosas que podemos ver es muy amplio, programas, películas, series, documentales, etc. También hay mucha gente que le encanta ver carreras de ciclismo, mountain bike o ciclocross. Por mi parte, lo que mejor me funciona es ver tanto películas como series en versión original con subtítulos. Es un modo muy efectivo de mantener nuestra mente ocupada en otras cosas, de entretenernos y divertirnos al ver lo que queremos y de aprender idiomas (se acaba aprendiendo bastante, sobre todo si los subtítulos también son en el idioma que queremos mejorar).
- Si hay posibilidad, otra opción es leer, siempre y cuando se tenga un atril que podamos poner cerca de la bicicleta y manejar sin dificultades.
- Y sobre todo, en la actualidad, con los rodillos interactivos que existen en el mercado, se abren infinidad de posibilidades, con los recorridos virtuales, multiplayer, etc.
Habrá ocasiones en las que incluso con los distractores que antes hemos mencionado (o si por el lugar donde hacéis el rodillo es imposible usarlos), el sufrimiento y el dolor, intentarán hacernos parar y que nos bajemos del rodillo, y si nos dejamos llevar, lo acabaremos haciendo. Es el momento en el que podemos usar las estrategias psicológicas que pueden ayudarnos a superar esos momentos complicados. Son estrategias activas.
- Parada de pensamiento y auto-instrucciones. De las que ya os hablé en otra entrada.
- Otras técnicas distractoras:
- Contar hacia atrás en bloques de pedaladas. Por ejemplo de 60 en 60 o de 100 en 100. Tras cada bloque, pensar, “otro minuto menos y sin darme cuenta”
- Contar la cadencia que llevamos por minuto. Intentar mantenerla, disminuirla o mantenerla. Al igual que con lo anterior, tras cada minuto la sensación es la misma, que te has quitado un minuto sin apenas enterarte.Contar hacia atrás los segundos que nos van faltando.
- Cualquier otra actividad mental, que nos sirva de distracción ante las sensaciones negativas, físicas y mentales y que se os pueda ocurrir en un momento determinado.
Aquí termino. Espero que pueda ser de utilidad y os haga más amenas y entretenidas las sesiones de rodillo, y anime a aquellos que no lo hacen habitualmente.
Quedo a vuestra disposición para cualquier duda, consulta, sugerencia o crítica que tengáis.
Un saludo!!!
buen dia acabo de enterarme de tu blog y la verdad es que me parece super bueno no sabia de mas personas interesadas en estos temas, aqui tienes un nuevo lector que seguira visitandote semanalmente.
felicidades por tu articulo sobre el rodillo es muy bueno
un saludo